Después de unas vacaciones de verano de ensueño, regresas a casa con energía renovada y dispuesta a ser la mejor versión de ti; sin embargo, después de días llenos de aventuras bajo el sol, nadar en aguas refrescantes, probar comidas diferentes y, por qué no, unos cuantos brindis, tu piel puede sentirse seca, con ardor y tirante.
Para revivir el glow de tu piel y ayudarla a recuperarse de las huellas que dejó la aventura, será indispensable que analices tu piel: ¿está más sensible que antes?, ¿tiene manchitas después de las vacaciones?, ¿está muy seca? Antes de retomar tu rutina de skincare, analiza de forma cuidadosa lo que tu piel está sintiendo, ya que puede ser que las cremas y productos que utilizabas antes de tus vacaciones puedan irritar tu piel.
Lo ideal es que retomes tu skincare de forma progresiva. No es necesario que utilices todos tus productos al mismo tiempo; lo ideal será ir introduciendo los productos uno a uno para poder tener todos sus beneficios y no causar irritación adicional a tu piel.
- Limpieza gentil: Lava tu piel con agua fría a tibia, no uses agua caliente. Además, tu limpiador debe ser suave y que aporte hidratación.
- Hidratación intensiva: Esta hidratación debe comenzar de dentro hacia afuera. Bebe agua de forma constante para que tu piel se mantenga hidratada. Después de la limpieza, utiliza un serum con propiedades hidratantes, por ejemplo, que contenga ácido hialurónico e inmediatamente después utiliza una crema o gel hidratante de acuerdo con tu tipo de piel. Si lo deseas, también puedes utilizar una mascarilla hidratante.
- Exfoliación: Puedes realizar una exfoliación gentil una vez a la semana para ayudar a que tu piel elimine esas células que se acumularon durante las vacaciones y hacen que tu piel luzca áspera.
- Cuidado con el sol: Aunque hayas regresado a tus actividades habituales, no bajes la guardia contra el sol. Continúa utilizando tu fotoprotector solar de amplio espectro, reaplícalo de forma adecuada a lo largo del día y evita la exposición directa al sol.
Además de cuidar tu piel, no olvides cuidar todo tu cuerpo. Retoma una alimentación saludable y variada con un alto contenido de frutas y verduras, ya que estas aportarán antioxidantes. Haz ejercicio de forma regular y duerme de forma adecuada.
En caso de que tu piel haya sufrido quemaduras por el sol, esté muy irritada o haya desarrollado manchas importantes, es necesario que consultes con tu médico antes de elegir cualquier producto para el cuidado de la piel, ya que, si eliges uno que no sea adecuado, puede generar más daño a tu piel.